Salud renueva su compromiso con el Día Mundial de la Salud Mental

Este año, bajo el lema “Salud Mental e Inclusión Social, un vínculo fundamental", se destaca la importancia de construir acciones que apunten a la inclusión sociolaboral para el ejercicio efectivo del derecho al trabajo, en tanto actividad significativa para cada persona, valorada socialmente, y remunerada.

El trabajo opera como estructurante psíquico y físico, a la vez que contribuye a la autoestima y dignidad de las personas posibilitando su circulación en el entramado social, potenciando la capacidad de autonomía en pos de lograr el máximo desarrollo posible en el ejercicio de sus derechos.

En Argentina se aprobó, hace más de 30 años, la Ley Provincial 2440 (sancionada en 1991) y a casi 14 años de la sanción de la Ley Nacional de Salud Mental 26.657 (sancionada en el 2010), que junto con la aprobación del Plan Nacional de Salud Mental 2013-2018, configuraron un nuevo escenario en el campo de la salud mental de nuestro país.

Esta ley constituye un paso clave hacia un cambio de paradigma, que garantiza el derecho a la protección de la salud mental de todas las personas y el pleno goce de los derechos humanos de aquellas con padecimiento mental, reconociendo la necesidad de crear redes de apoyo, contención y escucha entre las personas, las comunidades y los sistemas de salud.

Estrategias orientadas a la inclusión social

En 1991 se aprobó la Ley Provincial 2440 “De Promoción Sanitaria y Social de las Personas que Padecen Sufrimiento Mental”, dando un marco legal al programa de salud mental rionegrino.

El proceso de reestructuración de la atención brindada en relación a la salud mental en Río Negro ha requerido de una movilización, capacitación y adecuación continúa. En 1993 se formalizó la RISaMC mediante resolución N° 3524/93 del Ministerio de Salud y Desarrollo Social de Rio Negro, y avalada por la dirección de Capital Humano del Ministerio de Salud de la Nación, incorporando en 1994 los primeros profesionales en psicología, trabajo social, enfermeria y medicina. La descentralización de los recursos públicos provinciales habilitó nuevos Servicios de Salud Mental Comunitaria Interdisciplinarios, y la posibilidad de internación, junto con la observación clínica, en las salas de los hospitales generales de la provincia.

Al día de la fecha se ha triplicado la cantidad de efectores que trabajan en salud mental aumentando la cantidad y calidad de las prestaciones brindadas, se crearon  estructuras intermedias (Casas de Medio Camino y de Convivencia), se trabaja en la promoción de empresas sociales, el abordaje integral de usuario, familia y referentes sociales. El sistema de atención tiene como eje básico la atención en crisis en todos los hospitales de la provincia  e inclusión social de las personas con padecimiento mental.

Cuando es necesario se efectúan internaciones en los hospitales área programa distribuidos en diferentes localidades de la provincia, en salas comunes con la clínica médica.